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Mujeres en Costa Rica expuestas a agroquímicos en plantaciones de banano: un estudio del Instituto Regional de Estudios de Sustancias ❤️ Tóxicas

Por más de 20 años, los días de Lidieth Gomez han estado marcados por el zumbido de aviones que pulverizan ❤️ cultivos. Al amanecer y al anochecer, los cielos sobre Matina, capital de la provincia de Limón en la costa caribeña ❤️ de Costa Rica, están llenos de aeronaves que rocían una lluvia viscosa de agroquímicos sobre plantaciones de banano.

El mar verde ❤️ infinito de campos de banano que rodean la humilde casa de madera de Gomez pertenece a Limofrut, parte de Grupo ❤️ Acón, uno de los principales actores en la industria de exportación de banano y piña de Costa Rica.

Gomez, madre soltera ❤️ de tres hijos, es una de las 451 mujeres que participan en una investigación del Instituto Regional de Estudios de ❤️ Sustancias Tóxicas (IRET) de la Universidad Nacional de Costa Rica. Durante 14 años, este estudio sobre la exposición a pesticidas ❤️ ha investigado el impacto de los químicos utilizados en plantaciones de banano en la salud de la glándula tiroides y ❤️ el desarrollo fetal en mujeres embarazadas.

"Cada vez que pasan los aviones, mis ojos comienzan a arder y mis brazos me ❤️ pican", dice Gomez. Los síntomas comunes de la exposición a pesticidas incluyen náuseas, vómitos, mareos, desmayos, dermatitis y ojos irritados.

Muchos ❤️ de estos agroquímicos están prohibidos en Europa pero continúan produciéndose y exportándose a países como Costa Rica, donde contribuyen a ❤️ satisfacer la demanda mundial de bananos perfectos estéticamente.

Costa Rica es el tercer mayor exportador de banano del mundo y el ❤️ principal productor de piña. En 2024, produjo aproximadamente 2 millones de toneladas de bananos y 2.5 millones de toneladas de ❤️ piñas, principalmente para la exportación a los EE. UU. y Europa.

Entre 2000 y 2024, la producción de piña de Costa ❤️ Rica aumentó en un 700%, lo que contribuyó a la destrucción de más de 5,000 hectáreas (12,400 acres) de bosque ❤️ y provocó problemas de salud graves relacionados con plaguicidas en las comunidades locales.

El intenso uso de químicos en Costa Rica ❤️ ayuda a maximizar los rendimientos y producir frutas sin defectos, pero los efectos de este modelo de producción recaen en ❤️ gran medida en las personas locales y el medio ambiente. En junio de 2024, alumnos y personal de la escuela ❤️ primaria IDA La Victoria en Santa Rita de Río Cuarto comenzaron a notar un olor nauseabundo a productos químicos.

"Fue terrible. ❤️ Evacuamos a los niños, pero el aire afuera era peor que adentro. Casi todos los niños comenzaron a hiperventilar dentro ❤️ de minutos", dice la directora, Rosalyn Sibaja Gomez.

En agosto del mismo año, la misma escuela experimentó un evento similar, lo ❤️ que resultó en que 38 niños y maestros fueran llevados al hospital en ambos incidentes.

Documentos del IRET y documentos del ❤️ ministerio de salud vistos por el Guardian revelan que muchos de los plaguicidas encontrados en la escuela, incluyendo ametryn, diazinon, ❤️ clorpirifos, oxyfluorfen, terbufos y cadusafos, están prohibidos en Europa.

La empresa Agroindustrial RyB, la empresa encargada de la fumigación, no respondió ❤️ a las solicitudes de comentarios en varias ocasiones.

El incidente en Santa Rita de Río Cuarto no es excepcional. Varios otros ❤️ colegios en la región también han experimentado graves incidentes relacionados con plaguicidas.