El Partido Laborista estableció una rara línea divisoria con el gobierno sobre Gaza, diciendo que el Reino Unido 📉 debería dejar de enviar armas a Israel si llevaba a cabo un ofensivo en Rafah, debido al riesgo de una 📉 violación de la ley humanitaria internacional. Jonathan Ashworth, el subsecretario de Hacienda en la sombra, le dijo a Sky News 📉 que el Reino Unido debería detener las ventas de armas a Israel y dijo que un ofensivo a gran escala 📉 en Rafah sería "catastrófico más allá de la descripción".
Cameron dijo: "Para que haya un ofensivo a gran escala en Rafah, 📉 tendría que haber un plan absolutamente claro sobre cómo salvar vidas, cómo mover a las personas del camino, cómo asegurarse 📉 de que estén alimentadas, tengan medicamentos y refugio y todo. No hemos visto tal plan [...] así que no apoyamos 📉 un ofensivo de esa manera." Dijo que había hecho estos puntos en una llamada con Ron Dermer, un asesor cercano 📉 al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, el viernes.
La Oficina de Asuntos Exteriores continúa insistiendo en que la evacuación a gran 📉 escala de palestinos de Rafah aún no representa el ofensivo mayor que se opone.
Israel parece considerar que las advertencias occidentales 📉 son insuficientemente consecuentes como para contenerlos de ir tras los últimos cuatro batallones de Hamás que creen que están basados 📉 en Rafah. Pero Cameron también encuadró el ofensivo inminente en el contexto de Hamás rechazando aceptar un acuerdo de alto 📉 el fuego, diciendo que la verdadera presión debería estar en el grupo militante.
"Hamas ha sido ofrecido un trato que liberaría 📉 a cientos de prisioneros de las cárceles israelíes, que proporcionaría un descanso en la lucha para que llegueDesesperadamente ayuda a 📉 Gaza, y no lo están aceptando", dijo a Sky News.
Hamas afirma que había aceptado el trato, pero Israel lo contradice 📉 al afirmar que el grupo alteró los términos del trato de manera inaceptable la semana pasada, incluida la manera de 📉 hacerlo un alto el fuego permanente.